Olvidar las injurias sin afrenta, Es propiedad de pecho generoso. Frases

Vilma Vida Divina | INTRODUCCIÓN | MI POETA

INTRODUCCIÓN:

Desde que era muy pequeño sentí una irresistible atracción por los libros. Era como si hubiesen sido escritos para que algún día yo los leyese. Apenas comulgaba con aquellas letras enormes que a su vez venían entrelazadas con tentadoras ilustraciones, tenía que abrirlo y sentarme a hojearlo. Así fueron mis primeros balbuceos con la palabra impresa. Así fueron también mis primeras maniobras de infante enamorado de todo cuanto invitaba a fabular y a respirar de un modo diferente al que imponía la realidad.   Y así fue cómo Manuel González Busto, considerado hoy el poeta vivo más importante de Cuba, el más original, renovador y lírico de las últimas décadas en la isla y uno de los más importantes de la poesía hispanoamericana contemporánea, dio sus primeros pasos en la Literatura. Y así fue también cómo comenzó a descubrir que sí, que es posible soñar y revelar nuevas realidades donde la magia y la imaginería hacen posible la utopía y cuánto reino desborda la esperanza.

Luego, nacieron los primeros versos. Más que versos eran trazos que me llevaban el aire gozoso de retozar con aquellas emociones escritas al primer intento y que sobre el papel cobraban insospechadas vidas. Desde ese mismísimo instante, escribir poesía ha sido mi hobby preferido, algo de lo que ya nunca podré prescindir. Y es que la poesía salva, redime, hace posible esa otra vida que hubiésemos deseado vivir en vez de la nuestra porque permite la pluralidad vivencial y la confluencia de mundos imaginarios jamás concebidos.

Para mí, la poesía es la llave que abre todas las puertas. Siempre va en los bolsillos como un niño dormido. La poesía es la suerte que no siempre compramos: rumor infinito como un dado sin lluvia, como un libro sin nieve, como el ángel que dulce, muy dulce, nos lleva siempre a casa. La poesía es un boleto sin nombre, un parque sin las novias que danzan con las nubes cuando el poeta escribe:

• No me olvides, no te mueras, no hagas que te busque en ciudades prohibidas, en edades inciertas, en rostros como inviernos y en sueños como faros.

 La poesía es también la más fiel estocada: soledad que muere sin haber nacido cuando las olas sangran silencios y violines.  Cierta vez la poesía así me dijo:

• Ya no tengo morada. Solo en tu tristeza puedo derramarme. Solo en el dolor tengo arcángeles y príncipes. Solo en tus versos tengo panes y alas y besos y aguaceros.

Originales en pdf publicados en hobbiesenred No. Registro 1927-2008:

Pero bendecida fui: hoy Dios me concede un camino. Hoy la felicidad traza el retorno. Hoy las novias danzan con las nubes y encuentran novios en el polvo, milagros en el poema que dulce, muy dulce, nos lleva siempre a casa. No desesperes: quien de Aranjuez llora, encuentra versos en la nieve, en el cansancio sin lluvia que abre todas las puertas. No claudiques: quien de versos olvida, encuentra dagas en la sombra, parques que nunca conceden un idilio. ¿Sabías que soy el reino? ¿Sabías que sin mí no hay lágrimas ni rosas? ¿Sabías que de ciudades me nacen catedrales? ¿Sabías que ya los novios no son el universo? Ah, qué fuese de los muertos si no reinase en las noches.

Qué de los atardeceres si no escribiese odas la desesperanza ni me nacieran álamos en el Dios que me salva. Y así también me dijo:

• Hay quien te ama y no lo dice. Hay quien te adora y se disfraza. Hay quien te urge y se acobarda y se arrodilla y reza y al mar se va como si fuese una fiesta y no sangraran las olas silencios y violines. Pero Dios nunca escucha a los ingratos, nunca salva a los soberbios que acuchillan con máscaras fugaces.
• Dios sabe cuánto hemos amado, cuánto hemos perdido, cuánto de Aranjuez nos vamos para que vuelva Alfonsina en las noches de invierno y sigan las novias danzando con las nubes.
• Yo, la poesía, seré siempre tu carta. Seré siempre tu novia. Seré siempre el recuerdo que de otoños, renace; y de violines, muere. No ceses de buscarme. No ceses de escribirme: esfinge soy en los buzones del mundo. Así me dijo la poesía.
  Ah, la poesía es la novia que abre todas las puertas: lámpara que alumbra como un niño dormido, como el ángel que dulce, muy dulce, nos lleva siempre a casa cuando queremos amar y nos sorprende el naufragio. Poemas a la esperanza y versos al porvenir: de Aranjuez, van los versos danzando con las nubes.  

Yo, la poesía, seré siempre tu carta. Seré siempre tu novia. Seré siempre el recuerdo que de otoños, renace; y de violines, muere. No ceses de buscarme. No ceses de escribirme: esfinge soy en los buzones del mundo. Así me dijo la poesía.
Ah, la poesía es la novia que abre todas las puertas: lámpara que alumbra como un niño dormido, como el ángel que dulce, muy dulce, nos lleva siempre a casa cuando queremos amar y nos sorprende el naufragio. Poemas a la esperanza y versos al porvenir: de Aranjuez, van los versos danzando con las nubes.

Así la poesía. Así el poeta: ese ángel que por suerte aún sobrevuela el mundo decidido a no callarse nunca mientras haya vida y sueños y esperanzas y planetas y astros y trenes y ciudades y ganas de vivir y vivir y nunca morir, ah, nunca, alguien, en fin, a quien amar, a quien contarle, a quien decirle: __ Ay, me gustas tanto que no sé…

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Manuel González Busto
Colaborador www.hobbiesenred.com
Correo: poesia@hobbiesenred.com

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